Sólo la música que me gusta, me llega, me parece necesaria. Toda esa música que, con frecuencia, los medios se empeñan en impedir que escuchemos, pese a que, con mucha frecuencia, es la más valiosa.

lunes, 3 de diciembre de 2007

Andrea Parodi, sin reposo hasta el fin



Tenía 51 años y padecía un cáncer incurable de estómago desde hacía tres. Falleció el 17 de octubre de 2006, sin llegar a pasar un mes de su emocionante concierto en el anfiteatro romano de Cagliari (22 de septiembre de 2006). Tras conocer el éxito comercial con el grupo Tazenda, Andrea Parodi se había convertido en la voz por excelencia de Cerdeña, la tierra natal de su madre, y había recuperado su propia expresión emocional, lejos de las actuaciones televisivas con playback y las giras y comparecencias promocionales, que se la habían hecho insoportables.

Su singularísima voz no me era desconocida, pero debo admitir que no sabía gran cosa de él. Anoche, en mi pub habitual, tuve la excepcional oportunidad de ver y escuchar el concierto que concluye con el tema que pueden escuchar en este vídeo ('No potho reposare'). Debo admitir que me conmovió muy profundamente la persona y la música de este hombre que, consciente o no de ello, cantaba por última vez en público y, en el umbral de la muerte, daba 'Gracias a la vida' en castellano (la canción de Violeta Parra). Demacrado, esquelético y con una bolsa que contenía un dosificador de morfina colgada al cuello, abordaba la muerte desde el amor y el agradecimiento.

La suya fue, hasta el último momento, una vocación entusiasta de entregarse a través de lo que mejor sabía hacer. En una entrevista, confesaba que se había sentido aliviado cuando le dijeron que su cáncer no era operable porque temía perder el diafragma y no poder cantar. Su amor a la música y al público, junto a una fe religiosa que se expresaba también mediante el canto sacro (en el concierto interpreta 'Stabat Mater' junto a Elena Ledda), fueron sin duda el motor de su vida y la razón de su sonrisa, llena de dientes y de bondad.

Es una bellísima canción de amor la que cierra el concierto del adiós en Cagliari. Un tema en la lengua sarda, de su Cerdeña maternal, que dedicó a su joven compañera y coproductora de su último disco, Valentina Casaleda. Apenas unos días después de su muerte, quien fue 'su vida' (según su propia expresión) daba a luz una hija engendrada por él. La vida sigue. Siempre. Y la esperanza es un capital interminable.

Non potho reposare amore e coro,
pensende a tie so d'onzi momentu.
No istes in tristura prenda 'e oro,
ne' in dispiaghere o pensamentu.
T'assicuro che a tie solu bramo,
ca t'amo forte t'amo, e t'amo e t'amo.

Si m'esseret possibile d'anghelu
s'ispiritu invisibile piccabo
sas formas, e furabo dae chelu
su sole e sos isteddos e formabo
unu mundu bellissimu pro tene,
pro poder dispensare cada bene,
unu mundu bellissimu pro tene,
pro poder dispensare cada bene.

No potho viver, no, che'n amargura,
luntanu dae tene, amadu coro.
A nudda vale sa bella natura
si no iste accurzu su meu tesoro,
pro mi dare cossolu, e recreu
coro, Diosa, amada prus 'e Deu.

E t'assicuro che a tie solu bramo,
ca t'amo forte t'amo, e t'amo e t'amo.
T'assicuro che a tie solu bramo,
ca t'amo forte t'amo, t'amo e t'amo...

TRADUCCIÓN (A partir de la traducción al italiano)

No puedo reposar amor y corazón/ pensando en ti cada momento./ No estés triste joya de oro/ ni disgustada ni pensativa./ Te aseguro que a ti sólo te deseo / que te amo tanto, te amo y te amo y te amo.
Si me fuera posible de ángel/ de espíritu invisible tomaría/ la forma y robaría del cielo/ el sol y las estrellas y formaría/ un mundo bellísimo para ti/ para poder dispensar todo el bien.
No puedo vivir,no, sino en la amargura/ lejos de ti, amado corazón./ Para nada sirve la bella naturaleza/ si no está cerca mi tesoro/ para darme consuelo y alegría/ corazón, diosa amada más que Dios (*) .
Y te aseguro que a ti sólo deseo/ que te amo tanto, te amo y te amo y te amo/. Te aseguro que a ti sólo deseo/ que te amo tanto, te amo y te amo y te amo...

(*) En su concierto elude cantar estos dos versos.

8 comentarios:

Anónimo dijo...

Gracias Andrea por todo tú talento tú música tus canciones
Te dejo mi abrazo desde donde estés , si es que estás , seguirás brillando en nuestros corazones por siempre
Claudia desde Buenos Aires RA

Tordus Merula dijo...

Esta canción la he cantado yo infinidad de veces con mis amigos sardos, es una canción tan sentida...pero en este concierto y en este contexto, las risas de entonces se han convertido en lágrimas. Honor y gratitud a Andrea Parodi, paz y descanso a su alma.
Un saludo y gracias por este recuerdo

Anónimo dijo...

Desde que conocì a los Tazenda en 1991, la voz de Andrea me conmoviò profundamente. Tenìa un timbre muy especial y un alma mejor aùn.Era todo lo contrario a un divo. Gracias por este recuerdo y este espacio en español para la memoria de ese sardo sensible. Que su alma descanse en paz.
Armando (San Juan) Argantina

Galia Gálvez dijo...

Confieso que quedé fuertemente impresionada cuando meses atrás me dedicaron un tema de este hombre, quien para mi hasta entonces era desconocido. Al escuchar la fuerza de su canto al borde de la vida, como aquella criatura que ha vivido en tenacidad todo viento, oleajes y la serenidad de la mar y que repentinamente eleva viaje para reunirse con los seres de su casta, no pude contener las lagrimas. Creo que solo los seres como estos se hacen eternos en las voces de los pueblos. Recordemos que Andrea también cantó música del pueblo sardo. Grande Andrea Parodi con esa voz tan singular, su vida tan "brava" como su natal Sardigna y el ultimo concierto en Cagliari son un ejemplo de resistencia y gratitud por lo bueno y lo malo que nos regala la vida, siendo esta tan breve.

Galia Gálvez dijo...

Confieso que quedé fuertemente impresionada cuando meses atrás me dedicaron un tema de este hombre, quien para mi hasta entonces era desconocido. Al escuchar la fuerza de su canto al borde de la vida, como aquella criatura que ha vivido en tenacidad todo viento, oleajes y la serenidad de la mar y que repentinamente eleva viaje para reunirse con los seres de su casta, no pude contener las lagrimas. Creo que solo los seres como estos se hacen eternos en las voces de los pueblos. Recordemos que Andrea también cantó música del pueblo sardo. Grande Andrea Parodi con esa voz tan singular, su vida tan "brava" como su natal Sardigna y el ultimo concierto en Cagliari son un ejemplo de resistencia y gratitud por lo bueno y lo malo que nos regala la vida, siendo esta tan breve.

José María Feliu dijo...

Gran texto, además, de José Ramón San Juan. Gracias.

Doña Truhana dijo...

Gracias por la información. Es un grande. La versión con Al di Meola es inolvidable

Anónimo dijo...

Es precioso, para escuchar su voz mirar esto: https://www.youtube.com/watch?v=NbeGGTy7K78