skip to main |
skip to sidebar
Sólo la música que me gusta, me llega, me parece necesaria. Toda esa música que, con frecuencia, los medios se empeñan en impedir que escuchemos, pese a que, con mucha frecuencia, es la más valiosa.
El rechazo del sistema penitenciario estadounidense (llegó a entrevistarse
con Nixon para pedir su reforma) y la compasión que sentía por los
prisioneros llevaron a Johnny Cash a dar conciertos gratuitos en
diversas cárceles, lo que reforzó y consolidó la cualidad de mito que
siempre le acompañó. "San Quintín, que te pudras y ardas en el
infierno,/ que tus muros caigan y viva yo para contarlo,/ que todo el
mundo olvide que exististe alguna vez/ y que todo el mundo lamente que
no hiciste bien".
No hay comentarios:
Publicar un comentario